viernes, 19 de agosto de 2011

La Historia y la historia

MUNDOTORO

Ciudad Real (España). A José Tomás le volvió a faltar toro. Eso que se torea y se llama toro escribió una historia dentro de una tarde de Historia. Pura paradoja, pero cierta. Con casi 40 grandos en las nalgas y muchos más en esa especie de torturada postura, hombro con hombro,aliento con aliento,se sentço con orden el público para colocar el no hay billetes y ayudar, y de que forma, a que esta feria, además de tener su Historia, tenga,mañana y pasado, mucho público. Ayer,la novillada sin caballos, seis mil almas. Pero a esta tarde Histórica se lefue, ,en parte, la historia que se desea ver, la que se espera en esa postura de pegados con pegamento. Una corrida bella, pero quiza de una ganadería escasamente testada, dio al traste con lo deseado. No con el toreo de JT, que es mejor quer antes.
 La corrida de Torreherberos y Torrehandilla, bonita pero con su cara, bien hecha pero con plaza, no tuvo raza en sus embestidas. La raza la puso Tomás, y el público y hasta Jimñenez y Puerto. Hubo mas raza en elfuego de lapiedra del tendido a plomo que en una corrida para ser dibujada mas quepara ser toreada. Demasiado poco para tanto torero.  Jiménez se coló en la tarde y, aprovechando el lote de mejor condición con diferencia, tiró de frescura e inteligencia y con cabeza despejada supo hacer frente a sus dos toros, aplicando oficio y solvencia, dando pausas cuando los toros lo requerían y apretándolos cuando había que hacerlo.


A pesar de no contar con toros aptos, se pudo intuir cómo está toreando José Tomás desde su regreso en tres series a su primero, una con la derecha y dos con la mano zurda. Con encaje, pasándoselos muy cerca, ése es el nuevo José Tomás, que ha dado una vuelta de tuerca más a su toreo. Terciado y de movilidad sin xlase, fue toro de rabieta, muy bien liaidado y cueidado, animal de brios, pero sin fondo, bravuconcete pero no bravo. Distancia, tiempos, aire, mucho aire, ventajas todas al toro.  Y en medio de ese  dosificar y torear para el toro, hubo tres tandas maravillsamente encajadas, una con la derecha de una profundidad inédita en le y otra con la zurda de un trazo y una proximidad impecbales.Y aún una más,pero ya con eltoro dolido, soltandola cara. Ese tramo de faena sin economía, y unos dolblones pereciosos, no puedn quedar emborronados por un pinchazo. Ese es el JT cumbre. Luego, ell quinto, que  fue un jabonero deslucido, muyrajado y bruso,agarrado alpiso,  que nunca quiso embestir. Le dejó arrimarse,llegarle,pero nunca quiso tomar la muleta.


Puerto vio como el primero, que apuntó buen son, se partía una pata en el inicio de la faena mientras que el cuarto se rajó demasiado pronto. El manchego, que hizo un esfuerzo por reaparecer después de su percance en Málaga, estuvo más que digno con el toro abrigado en tablas. Nolehicieron mucho caso.Y si se lohicieron a Jiménez.Habráque decidir si los toreros que ya no son novedad merecen credito y reconocimiento.    Se llevó elmejor lote,si,pero elprimeropara tirar y consentir y lo hizo con lamano baja y de verdad, y muy listo y capaz con el sexto, al que cuidó e hizo que durase. En esa historia se coló de verdad Jiménez en una tarde seria del torero.

Plaza de toros de Ciudad Real. Primera de feria. Calor brutal. Cartel de No Hay Billetes. Toros de Torrehandilla y Torreherberos, bien presentados, bonitos, con cara y con plaza pero sin raza. Mejor el lote de César Jiménez. Víctor Puerto, silencio y ovación tras petición; José Tomás, oreja y ovacion; César Jiménez, oreja con petición de la segunda y oreja
 FUENTE:www.mundotoro.com

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